de judios

Esta un Judio-Argentino en la playa con su familia..

Su hijito que juega con la arena en la orilla del mar, es arrastrado mar adentro por una enorme Ola. Su padre Samuel, deja de jugar Burako y corre desesperado hacia la orilla, mira al cielo y se dirige directamente a Dios:

– «Dios mio… soy yo, Samuel, no podés hacerme esto a mí… no podés llevarte al nene… yo siempre he sido un buen judío observante, ayuno, cumplo todo lo que dice la religión, la sigo al pie de la letra, no podes hacerme ésto Dios… te lo pido por favor !… voy a Hebraica y a Macabi, colaboro con la comunidad… por favor , por favor!… devuélveme a mi hijo… tráelo de nuevo junto a mí…!!!»

De pronto un rayo rompe el cielo. El estruendo deja mudos a los veraneantes… una nueva gran ola llega desde el mar… y regresa al niño a la orilla sano y salvo…Samuel es testigo del milagro, su amado hijo ha vuelto…
Entonces, con lágrimas en los ojos, vuelve a mirar al cielo y a comunicarse con el Supremo: – … ¿y la palita?